El efecto dominó: la carrera comienza entre los pueblos del Mundo Árabe para acabar con sus regímenes. La caída de Mubarak (82 años) después de 30 años de gobierno, el viernes pasado, y la huida de Ben Alí (74 años) incitó a otros países de la zona a iniciar sus protestas: Yemen, Argelia, Libia, Marruecos, Siria, Jordania, Bahrein e Irán.
El abanico de las peticiones oscila entre reformas políticas y económicas hasta la caída de los sistemas totalitarios gobernantes. La forma de enfrentarse a estas manifestaciones, que acaban en manifestaciones masivas, las autoridades de algunos países empiezan a aceptar las peticiones de los manifestantes por el miedo a que se acaben siendo como la furia egipcia y, anteriormente, la tunecina, cuando cayó el régimen de Ben Alí, acabando con 23 años de gobierno y hasta el momento los tunecinos siguen luchando con mucha fuerza para acabar con el sistema del régimen anterior. También siguen en esa línea los egipcios.
1.- Bahrein: un pequeño reino del Golfo Pérsico compuesto por una minoría de musulmanes sunníes que gobiernan y una mayoría de musulmanes chiíes, privados de la mayoría de sus derechos políticos y con limitada participación en el gobierno.
Todos ellos piden una mayor participación en el gobierno, no sólo los chiíes sino también los propios sunníes. Es un país rico comparado con Egipto y Túnez. Por ahora llevan dos muertos y un número incierto de heridos en las últimas 24 horas. El gobierno ha pedido disculpas por los muertos. Estas confrontaciones se dieron entre las fuerzas de seguridad bahraní con los manifestantes, que pedían la reforma política y económica, gobernada por una familia sunní que tiene en sus manos el poder político y económico. Las fuerzas de seguridad utilizaron gas lacrimógeno contra los manifestantes, que utilizaron el mismo sendero del Facebook para la conexión social y pedir reformas y que liberaran a los detenidos chiíes. La mayoría de las manifestaciones se concentran en las zonas de mayorías chiíes, pues no están conformes con las reformas políticas que hizo este pequeño país donde el parlamento es electo pero de una oligarquía ligada a la familia que gobierna. El rechazo al monopolio de esta oligarquía, y la búsqueda del reparto justo del espacio político y la riqueza del país, que depende en su mayor parte del vecino saudí, es el aliciente para estos jóvenes, que ven en Egipto el modelo a seguir. Lo que confirma la importancia de Egipto en la zona.
2.- Libia: país históricamente ligado a Egipto gobernado por un extravagante líder que gobierna desde hace 41 años, un modelo republicano creado por él donde el gobierno es el pueblo y él es el líder coordinador hermano de los libios. Se hace llamar “hermano coronel” Mu`ammar el-Qaddafi (o Gaddafi que es como se pronuncia en libio la Q). 213 personajes políticos libios que viven en el exilio pidieron su dimisión y la transición pacífica del poder para la sociedad plural civil y también utilizaron Internet para difundir sus ideas y llamar a los libios a manifestarse contra la corrupción y la pobreza. Estipularon en un comunicado que fue firmado por unos movimientos llamados “Organizaciones y sectores y fuerzas políticas independientes” y personajes nacionales libios y organizaciones de derechos humanos.
Las organizaciones que firmaron el llamamiento fueron: la Unión Republicana para la Democracia y la Justicia Social; el Frente para la Salvación de Libia; el Movimiento Nacional Libio; el Congreso de la Oposición Libia; el Movimiento de la Unión Islámica Libia; el Movimiento de Salvación; el Comité Libio para la Verdad y la Justicia; la Unión de escritores e intelectuales libios. El mensaje más relevante del comunicado era: “estamos en una fase histórica donde estamos observando el nacimiento de una nueva política liderada por jóvenes de otros países árabes vecinos y por lo tanto pedimos a todos los libios incluidos los que trabajan en las instituciones del régimen que pongan frente a sus ojos los intereses del país y del pueblo y que tomen la buena decisión, avalados por otras experiencias que afirman que el cambio es necesario y que es cuestión de tiempo”. Utilizaron Facebook para convocar a manifestarse en Libia el jueves 17 de febrero, y lo más curioso es que Qaddafi dijo que él era el primero que iba a ir porque el país es una república popular y que él es uno más y que quiere lo mejor para Libia y los libios. Pero a pesar de la comedia y el buen humor del líder, la situación es para preocuparse porque Libia, aunque es un país rico, no está mejor que Egipto o Túnez.
3.- Irán: la incitación del gobierno iraní al pueblo egipcio para derrocar a Mubarak tuvo un efecto negativo ya que se volvió en su contra pues animó a manifestarse a los iraníes, que viven bajo una dictadura de carácter religioso pero no difiere tanto de la institución militar que gobierna en Egipto, dado que el mismo método de represión y el empleo de la fuerza contra los manifestantes acaba de empezar a desmadejar el ovillo del régimen iraní, que es otro modelo fracasado en Oriente.
4.- Siria: en este país, desde diciembre de 2009, el gobierno cerró las redes sociales de Internet porque acusaron a una joven siria de 19 años llamada Tal al-Muluhi, del delito de pasar información a EEUU, y fue condenada a 5 años de prisión. Esta joven dijo en una red social que Siria está gobernada por el partido Baaz desde hace 50 años, e invitaba al presidente norteamericano Barak Obama a que haga un mayor esfuerzo para apoyar la cuestión palestina. En Siria, la represión, el paro y la falta de libertad son los problemas que sufren los jóvenes, que sueñan con un cambio aunque ven que está lejos en este momento. Y la única vía es emigrar porque no pueden aguantar más el trabajo de 13 horas diario, como la joven enfermera Salma, que cobra 200$ al mes, y que dice que en Siria nadie se puede expresar con libertad y que cada vez que intentas abrir la boca miras antes a tu alrededor porque tienes la sensación de que alguien te está vigilando.
En Jordania y Argelia, al igual que en Yemen y Marruecos, las raíces de las protestas se parecen a las de los otros países: el paro, la corrupción y la pobreza y el dominio del estado policial. Todo ello es lo que genera la angustia que siente la gente y el deseo de tener la libertad e igualdad de oportunidades.
Las condiciones que llevaron a la caída de Ben Alí y Mubarak abundan en Argelia, un país con una población muy joven donde sólo hay dos vías: el paro o la emigración, con una corrupción de la élite militar y de sus familiares enorme, como en Egipto y Túnez, y un régimen que advierte de una guerra civil cuyo fuego aviva él mismo y esos métodos de los regímenes dictatoriales deben acabar porque todos los pueblos tienen derecho a la democracia y a una vida digna.
El abanico de las peticiones oscila entre reformas políticas y económicas hasta la caída de los sistemas totalitarios gobernantes. La forma de enfrentarse a estas manifestaciones, que acaban en manifestaciones masivas, las autoridades de algunos países empiezan a aceptar las peticiones de los manifestantes por el miedo a que se acaben siendo como la furia egipcia y, anteriormente, la tunecina, cuando cayó el régimen de Ben Alí, acabando con 23 años de gobierno y hasta el momento los tunecinos siguen luchando con mucha fuerza para acabar con el sistema del régimen anterior. También siguen en esa línea los egipcios.
1.- Bahrein: un pequeño reino del Golfo Pérsico compuesto por una minoría de musulmanes sunníes que gobiernan y una mayoría de musulmanes chiíes, privados de la mayoría de sus derechos políticos y con limitada participación en el gobierno.
Todos ellos piden una mayor participación en el gobierno, no sólo los chiíes sino también los propios sunníes. Es un país rico comparado con Egipto y Túnez. Por ahora llevan dos muertos y un número incierto de heridos en las últimas 24 horas. El gobierno ha pedido disculpas por los muertos. Estas confrontaciones se dieron entre las fuerzas de seguridad bahraní con los manifestantes, que pedían la reforma política y económica, gobernada por una familia sunní que tiene en sus manos el poder político y económico. Las fuerzas de seguridad utilizaron gas lacrimógeno contra los manifestantes, que utilizaron el mismo sendero del Facebook para la conexión social y pedir reformas y que liberaran a los detenidos chiíes. La mayoría de las manifestaciones se concentran en las zonas de mayorías chiíes, pues no están conformes con las reformas políticas que hizo este pequeño país donde el parlamento es electo pero de una oligarquía ligada a la familia que gobierna. El rechazo al monopolio de esta oligarquía, y la búsqueda del reparto justo del espacio político y la riqueza del país, que depende en su mayor parte del vecino saudí, es el aliciente para estos jóvenes, que ven en Egipto el modelo a seguir. Lo que confirma la importancia de Egipto en la zona.
2.- Libia: país históricamente ligado a Egipto gobernado por un extravagante líder que gobierna desde hace 41 años, un modelo republicano creado por él donde el gobierno es el pueblo y él es el líder coordinador hermano de los libios. Se hace llamar “hermano coronel” Mu`ammar el-Qaddafi (o Gaddafi que es como se pronuncia en libio la Q). 213 personajes políticos libios que viven en el exilio pidieron su dimisión y la transición pacífica del poder para la sociedad plural civil y también utilizaron Internet para difundir sus ideas y llamar a los libios a manifestarse contra la corrupción y la pobreza. Estipularon en un comunicado que fue firmado por unos movimientos llamados “Organizaciones y sectores y fuerzas políticas independientes” y personajes nacionales libios y organizaciones de derechos humanos.
Las organizaciones que firmaron el llamamiento fueron: la Unión Republicana para la Democracia y la Justicia Social; el Frente para la Salvación de Libia; el Movimiento Nacional Libio; el Congreso de la Oposición Libia; el Movimiento de la Unión Islámica Libia; el Movimiento de Salvación; el Comité Libio para la Verdad y la Justicia; la Unión de escritores e intelectuales libios. El mensaje más relevante del comunicado era: “estamos en una fase histórica donde estamos observando el nacimiento de una nueva política liderada por jóvenes de otros países árabes vecinos y por lo tanto pedimos a todos los libios incluidos los que trabajan en las instituciones del régimen que pongan frente a sus ojos los intereses del país y del pueblo y que tomen la buena decisión, avalados por otras experiencias que afirman que el cambio es necesario y que es cuestión de tiempo”. Utilizaron Facebook para convocar a manifestarse en Libia el jueves 17 de febrero, y lo más curioso es que Qaddafi dijo que él era el primero que iba a ir porque el país es una república popular y que él es uno más y que quiere lo mejor para Libia y los libios. Pero a pesar de la comedia y el buen humor del líder, la situación es para preocuparse porque Libia, aunque es un país rico, no está mejor que Egipto o Túnez.
3.- Irán: la incitación del gobierno iraní al pueblo egipcio para derrocar a Mubarak tuvo un efecto negativo ya que se volvió en su contra pues animó a manifestarse a los iraníes, que viven bajo una dictadura de carácter religioso pero no difiere tanto de la institución militar que gobierna en Egipto, dado que el mismo método de represión y el empleo de la fuerza contra los manifestantes acaba de empezar a desmadejar el ovillo del régimen iraní, que es otro modelo fracasado en Oriente.
4.- Siria: en este país, desde diciembre de 2009, el gobierno cerró las redes sociales de Internet porque acusaron a una joven siria de 19 años llamada Tal al-Muluhi, del delito de pasar información a EEUU, y fue condenada a 5 años de prisión. Esta joven dijo en una red social que Siria está gobernada por el partido Baaz desde hace 50 años, e invitaba al presidente norteamericano Barak Obama a que haga un mayor esfuerzo para apoyar la cuestión palestina. En Siria, la represión, el paro y la falta de libertad son los problemas que sufren los jóvenes, que sueñan con un cambio aunque ven que está lejos en este momento. Y la única vía es emigrar porque no pueden aguantar más el trabajo de 13 horas diario, como la joven enfermera Salma, que cobra 200$ al mes, y que dice que en Siria nadie se puede expresar con libertad y que cada vez que intentas abrir la boca miras antes a tu alrededor porque tienes la sensación de que alguien te está vigilando.
En Jordania y Argelia, al igual que en Yemen y Marruecos, las raíces de las protestas se parecen a las de los otros países: el paro, la corrupción y la pobreza y el dominio del estado policial. Todo ello es lo que genera la angustia que siente la gente y el deseo de tener la libertad e igualdad de oportunidades.
Las condiciones que llevaron a la caída de Ben Alí y Mubarak abundan en Argelia, un país con una población muy joven donde sólo hay dos vías: el paro o la emigración, con una corrupción de la élite militar y de sus familiares enorme, como en Egipto y Túnez, y un régimen que advierte de una guerra civil cuyo fuego aviva él mismo y esos métodos de los regímenes dictatoriales deben acabar porque todos los pueblos tienen derecho a la democracia y a una vida digna.
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